En las últimas semanas, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) ha llevado a cabo movilizaciones significativas en la Ciudad de México, bloqueando avenidas principales y otros puntos estratégicos. Estas acciones, que han captado la atención de la opinión pública, son el resultado de un descontento acumulado por años en el sector educativo. Las demandas de los docentes son claras y se centran en aspectos fundamentales que afectan su bienestar laboral y personal.
**Demandas Clave de la CNTE**
Desde el 15 de mayo, coincidiendo con el Día del Maestro, la CNTE ha exigido al gobierno federal la atención a varias demandas críticas. Entre las más destacadas se encuentran:
1. **Derogación de la Ley del ISSSTE de 2007**: Esta ley, que fue implementada durante la administración del ex presidente Felipe Calderón, ha sido objeto de críticas por eliminar el sistema de pensiones solidarias y reemplazarlo por cuentas individuales administradas por Afores. Los docentes argumentan que este cambio ha perjudicado su capacidad de acceder a una pensión digna, ya que dependen de ahorros individuales que no garantizan un retiro adecuado.
2. **Derogación de la Reforma Educativa de 2019**: La CNTE también ha solicitado la eliminación de esta reforma, que consideran perjudicial para la calidad de la educación y los derechos laborales de los docentes.
3. **Aumento del 100% en el salario**: Los maestros argumentan que el incremento del 10% propuesto por el gobierno es insuficiente para cubrir sus necesidades básicas. La CNTE sostiene que un aumento significativo es necesario para mejorar su calidad de vida.
4. **Reinstalación de docentes cesados**: Muchos maestros han sido despedidos como consecuencia de las reformas educativas. La CNTE exige su reinstalación en sus puestos de trabajo.
5. **Mejora en el servicio de salud**: La atención médica y los servicios proporcionados por el ISSSTE también son parte de las demandas, ya que los docentes buscan una atención más eficiente y accesible.
**Reacciones del Gobierno y Propuestas de Diálogo**
La respuesta del gobierno federal, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, ha sido ofrecer un incremento salarial del 9% retroactivo a enero, además de un aumento adicional en septiembre. Sin embargo, esta propuesta fue rechazada por la CNTE, que considera que no aborda adecuadamente sus necesidades.
Durante las negociaciones, el gobierno ha instado a la CNTE a priorizar el bien común y el interés de la comunidad educativa. La Secretaría de Gobernación, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el ISSSTE han mantenido abiertas las líneas de diálogo, esperando una respuesta a las cinco propuestas que presentaron al magisterio. Estas propuestas incluyen:
– Emitir un decreto para reducir progresivamente la edad de jubilación, acercándose a las condiciones previas a la reforma de 2007.
– Crear un colectivo interdisciplinario para revisar los esquemas de jubilación.
– Desaparecer la Unidad del Sistema para la Carrera de las y los Maestros.
– Continuar con las comisiones tripartitas para atender demandas estatales.
– Establecer un nuevo registro del régimen de jubilación para aquellos que no lo hicieron en 2007.
Mario Delgado, secretario de Educación Pública, ha enfatizado que las propuestas presentadas son lo máximo que el gobierno puede ofrecer sin comprometer la salud de las finanzas públicas. En sus declaraciones, ha mencionado que abrogar la Ley del ISSSTE de 2007 implicaría un costo financiero insostenible para el país, lo que ha generado un debate sobre la viabilidad de las demandas de la CNTE.
El gobierno ha resaltado que ha reconocido al magisterio a través de acciones concretas, como aumentos salariales progresivos y la creación de un Fondo de Pensiones para el Bienestar. Sin embargo, la CNTE continúa insistiendo en que estas medidas son insuficientes y que se requiere un cambio estructural en el sistema educativo y de pensiones.
**El Futuro del Movimiento Magisterial**
Las movilizaciones de la CNTE reflejan un descontento profundo que va más allá de las demandas salariales. Los docentes están luchando por un sistema educativo que garantice sus derechos laborales y una pensión digna al final de su carrera. A medida que las negociaciones continúan, el futuro del movimiento magisterial en México dependerá de la capacidad del gobierno para escuchar y atender estas demandas de manera efectiva. La situación actual plantea interrogantes sobre el compromiso del Estado con la educación y el bienestar de sus trabajadores, y cómo se resolverán las tensiones entre las necesidades del magisterio y las limitaciones financieras del país.