El 3 de enero de 1969, la escena teatral en México se vio sacudida por la llegada de ‘Hair’, un musical que no solo rompió esquemas en Broadway, sino que también desató una controversia sin precedentes en el país. Este espectáculo, que abordaba temas de la contracultura hippie, la guerra de Vietnam y la revolución sexual, se convirtió en un símbolo de la lucha por la libertad de expresión en una época marcada por la represión y el conservadurismo.
La obra, escrita por Gerome Ragni y James Rado, con música de Galt MacDermot, se estrenó en un pequeño teatro de Nueva York en 1967 y rápidamente ganó popularidad. Su llegada a Acapulco, un destino turístico de lujo, fue un evento esperado, pero lo que ocurrió esa noche fue más allá de lo que los organizadores habían anticipado. Con un elenco compuesto por actores mexicanos y extranjeros, ‘Hair’ prometía ser un espectáculo innovador, pero también un desafío a las normas sociales de la época.
### La Noche del Estreno: Un Escándalo Inminente
Desde el momento en que se levantó el telón, la obra capturó la atención de todos los presentes. Los actores, desnudos y portando lámparas, comenzaron a bailar y cantar ‘Let the Sunshine In’, un himno de esperanza y libertad. Sin embargo, lo que para muchos era una celebración de la vida y la libertad, para las autoridades se convirtió en un ataque directo a la moral pública. En un informe policial, los agentes describieron la obra como un «atentado contra la moral», señalando las pancartas que los actores levantaron durante la función, que contenían mensajes provocativos como «La policía fuma marihuana» y «El alcohol mata, la mota no».
La obra no solo abordaba el uso de drogas y la sexualidad, sino que también se burlaba de la bandera de Estados Unidos, lo que generó un escándalo aún mayor. Las autoridades, alarmadas por el contenido de la obra, decidieron actuar rápidamente. A las pocas horas de su estreno, se emitieron órdenes para clausurar el espectáculo y deportar a los actores extranjeros, quienes habían llegado a México con la esperanza de compartir su arte.
### La Reacción de las Autoridades: Censura y Represión
El gobierno mexicano, bajo la presidencia de Gustavo Díaz Ordaz, había estado en alerta tras la masacre de estudiantes en 1968, y la llegada de ‘Hair’ fue vista como una amenaza a la estabilidad social. La Dirección Federal de Seguridad (DFS) se movilizó rápidamente, enviando inspectores de migración al aeropuerto de Acapulco para detener a los actores. Un informe revela que el jefe de policía local, Luis Izaguirre, recibió instrucciones directas de la Secretaría de Gobernación para llevar a cabo la operación de deportación.
Los actores, que se encontraban en diferentes hoteles, fueron difíciles de localizar. Sin embargo, el 5 de enero, 15 de ellos fueron finalmente arrestados y se les notificó que debían abandonar el país en un plazo de 24 horas. La imagen de estos artistas, vestidos con ropa de la época y con sus característicos peinados, siendo conducidos al aeropuerto, se convirtió en un símbolo de la represión cultural en México.
La censura de ‘Hair’ no solo marcó el final de un espectáculo que había prometido ser revolucionario, sino que también dejó una huella profunda en la historia del teatro en México. La obra, que había tenido un éxito rotundo en Nueva York, fue considerada «altamente pornográfica» y un «atentado contra la moral» por las autoridades mexicanas, quienes no estaban dispuestas a tolerar un desafío a sus normas y valores.
A pesar de la represión, ‘Hair’ sigue siendo recordada como un hito en la historia del teatro musical. Su mensaje de paz, amor y libertad resonó en una generación que buscaba romper con las convenciones sociales. La obra no solo fue un reflejo de la contracultura de los años sesenta, sino que también se convirtió en un símbolo de la lucha por la libertad de expresión en un contexto de censura y represión.
La historia de ‘Hair’ en México es un recordatorio de que el arte tiene el poder de desafiar, provocar y, en última instancia, transformar. A pesar de los intentos de silenciarlo, el legado de esta obra perdura, inspirando a nuevas generaciones a cuestionar las normas y luchar por un mundo más libre y justo.