La plaza pública ha evolucionado hacia un espacio digital donde las redes sociales se han convertido en el escenario principal de la política contemporánea. En este contexto, Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, ha logrado consolidarse como una figura central en las conversaciones políticas, alcanzando un notable 75% de aprobación digital en octubre de 2025. Este aumento en su popularidad no solo refleja su capacidad para navegar en un entorno hostil, sino también su habilidad para conectar con la ciudadanía a través de plataformas digitales.
La investigación realizada por MilenIA, una Central de Datos e Inteligencia Artificial, ha revelado que en septiembre de 2025, se generaron 8.5 millones de publicaciones y videos sobre Sheinbaum en diversas redes sociales, acumulando 218 millones de interacciones. Este fenómeno la posiciona como la líder digital indiscutible, mientras que sus opositores, como Alejandro Alito Moreno y Lilly Téllez, enfrentan un rechazo abrumador en el ámbito digital.
### La Popularidad de Sheinbaum: Un Análisis de su Estrategia Digital
La estrategia de comunicación de Claudia Sheinbaum se basa en la premisa de “continuidad con cambio”, un lema que ha resonado con los ciudadanos y que ha sido fundamental para su ascenso en la política. Su estilo de gobernar, menos estridente y más técnico, ha permitido que mantenga el legado de la cuarta transformación, al tiempo que proyecta su propia identidad política. Este enfoque ha sido clave para su éxito en un entorno donde la crítica y el escarnio son moneda corriente.
Los números son elocuentes: mientras Sheinbaum recibe tres menciones positivas por cada mención negativa, sus opositores luchan por mantenerse a flote en un mar de burlas y críticas. Alejandro Alito Moreno, líder del PRI, presenta un desastroso 20% de aprobación y un 80% de rechazo, mientras que Lilly Téllez, senadora del PAN, se enfrenta a un 30% de comentarios positivos frente a un 70% negativos. Esta disparidad en la percepción pública resalta la efectividad de la estrategia digital de Sheinbaum, que ha sabido capitalizar su imagen y conectar con las emociones de los ciudadanos.
El contraste es aún más evidente al observar las interacciones: mientras Sheinbaum acumula 53 millones de interacciones, Téllez y Moreno apenas logran generar un tercio de esa cifra, pero con un saldo tóxico que les perjudica aún más. Este fenómeno pone de manifiesto que en la política digital, la visibilidad no siempre se traduce en apoyo; en muchos casos, puede convertirse en un castigo.
### La Oposición en Crisis: Desafíos y Estrategias
La oposición política en México enfrenta un panorama complicado. Con figuras como Alito Moreno y Lilly Téllez en el centro de la atención, el rechazo hacia estos líderes se ha intensificado. La incapacidad de articular narrativas atractivas y constructivas ha llevado a que la oposición se convierta en un blanco fácil para las críticas en las redes sociales. La falta de una estrategia clara para conectar con las audiencias ha dejado a estos líderes atrapados en un ciclo de quejas y reacciones negativas.
Por otro lado, otros líderes de la oposición, como Jorge Álvarez Máynez y Ricardo Anaya, han logrado mantener cierta popularidad, aunque también enfrentan sus propios desafíos. Álvarez Máynez, presidente de Movimiento Ciudadano, ha perdido exposición pública, pero aún cuenta con el apoyo del 60% de los usuarios digitales. Anaya, tras su regreso de un autoexilio en Estados Unidos, ha logrado equilibrar las pasiones que despierta, con un 50% de comentarios positivos. Sin embargo, ambos se encuentran en una situación precaria, donde la falta de una narrativa convincente les impide capitalizar su popularidad.
La situación se complica aún más para los líderes del PAN, como Kenia López Rabadán y Marko Cortés, quienes enfrentan un rechazo significativo en las redes sociales. López Rabadán, a pesar de haber moderado su discurso, aún genera un 60% de críticas, mientras que Cortés es el dirigente que menos interacciones provoca, con solo 6 millones. Esta falta de interacción es un indicador claro de que la oposición no está logrando conectar con la ciudadanía, lo que podría tener repercusiones en las próximas elecciones.
### La Estrategia de Morena: Aprovechando el Éxito de Sheinbaum
Dentro del propio partido oficialista, la popularidad de los líderes se presenta con matices. Luisa María Alcalde, presidenta nacional de Morena, tiene una aprobación del 50%, mientras que Adán Augusto López enfrenta un 65% de rechazo. Esta división en la percepción pública refleja la necesidad de que Morena capitalice el éxito de Sheinbaum en las próximas elecciones. La estrategia electoral del partido se centrará en utilizar la buena imagen de la presidenta para motivar el voto en favor de Morena y sus aliados, especialmente en un contexto donde algunos de sus dirigentes enfrentan un desgaste significativo.
El panorama electoral se presenta como una oportunidad para que Morena mantenga su fuerza en los estados y en el Congreso federal. La consulta de revocación de mandato se vislumbra como un momento crucial para consolidar el apoyo hacia el movimiento y asegurar la continuidad de su agenda política. Sin embargo, el éxito de esta estrategia dependerá de la capacidad de Sheinbaum para traducir su popularidad digital en gobernabilidad efectiva, enfrentando desafíos como la violencia criminal y la presión económica global.
La política mexicana se ha convertido en un espectáculo permanente en la aldea digital, donde las reputaciones se construyen y destruyen en cuestión de horas. En este contexto, Claudia Sheinbaum ha demostrado que no solo sabe gobernar, sino que también sabe jugar el juego de la política con astucia. Su capacidad para conectar con la ciudadanía y su habilidad para manejar la narrativa digital la posicionan como una líder fuerte en un entorno donde sus adversarios parecen estar perdiendo terreno. La interacción en las redes sociales, aunque no garantiza la gobernabilidad, se ha convertido en un factor determinante en la política contemporánea, marcando la pauta para el futuro electoral en México.