La situación actual del suministro de medicamentos en México ha generado un intenso debate entre las autoridades y los representantes de la industria farmacéutica. Recientemente, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que la próxima semana se revelarán las empresas que no han cumplido con las entregas de medicamentos, así como las sanciones correspondientes. Sin embargo, los líderes del sector han respondido que los problemas no se deben a la falta de cumplimiento, sino a una serie de factores logísticos y de planificación que complican el proceso de entrega.
### Problemas Logísticos y de Planeación
José Luis García, presidente de la Asociación Mexicana de Distribución Institucional de Salud, ha señalado que los retrasos en la entrega de medicamentos no son consecuencia de la falta de pago por parte del gobierno, sino de una mala planeación y cuellos de botella logísticos. Aseguró que los proveedores cumplen con los plazos establecidos, pero enfrentan múltiples obstáculos que no dependen de ellos. Por ejemplo, mencionó que los permisos de importación y los problemas con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) son factores que complican la liberación de productos. Además, la saturación en los almacenes y los embudos en la última milla de distribución son problemas recurrentes que afectan la entrega oportuna de medicamentos.
García también destacó que el gobierno federal impone tiempos estrictos para la entrega de productos, que oscilan entre 10 y 14 días, mientras que los pagos, que deberían realizarse en un plazo de 17 días hábiles, suelen tardar mucho más. Esto crea una presión constante sobre los proveedores, quienes deben cumplir con los plazos de entrega a pesar de que las condiciones no son favorables. «Ser proveedor del gobierno es vivir en estrés todos los días», afirmó García, enfatizando que el verdadero error radica en la falta de una planificación adecuada desde el diseño de las licitaciones.
### La Realidad del Abastecimiento de Dispositivos Médicos
Por otro lado, Carlos Salazar Gaytán, presidente de la Asociación Nacional de Proveedores de la Salud (ANAPS), también ha reconocido que existen retrasos en la entrega de dispositivos médicos, pero atribuyó estos problemas a factores estructurales y logísticos, no a incumplimientos deliberados. De las 34 empresas mencionadas por el gobierno, al menos 19 pertenecen al sector de dispositivos médicos, que no son farmacéuticos. Muchas de estas empresas ya tenían el producto listo para ser entregado, pero enfrentaron obstáculos en el proceso de entrega.
Salazar explicó que en varios casos, el material ya se encontraba en México, pero el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el programa IMSS-Bienestar no proporcionaban citas para la entrega. Esto ha llevado a un colapso en los almacenes, que no tienen espacio para recibir más productos. A pesar de estos desafíos, Salazar aseguró que su asociación ha logrado establecer acuerdos con el gobierno para que las empresas cumplan con sus entregas en un plazo ordinario, con un objetivo de 80% en octubre y 100% en noviembre.
Un aspecto importante que Salazar destacó es que el 67% de los dispositivos médicos adjudicados en la compra consolidada son de origen extranjero, lo que implica que los procesos de importación y fabricación son más largos. Esto es especialmente relevante considerando que el sector de dispositivos médicos está compuesto en gran parte por pequeñas y medianas empresas (Pymes), que no cuentan con los mismos recursos que la industria farmacéutica. Por lo tanto, es crucial que el gobierno distinga entre las capacidades de ambos sectores, ya que sus tiempos de producción y entrega son completamente diferentes.
### La Última Milla: Un Cuello de Botella Crítico
Ambos líderes del sector coincidieron en que la última milla de distribución, es decir, la entrega final a los hospitales, representa el mayor cuello de botella en el proceso de suministro. Aunque los productos llegan a los almacenes de Huehuetoca, la falta de una distribución oportuna es un problema que no puede ser atribuido a la industria. García enfatizó que es fundamental garantizar el acceso oportuno a los tratamientos y materiales que la población necesita, más allá de quién es el responsable de los retrasos.
La falta de coordinación y planificación en el sistema de salud ha llevado a una situación en la que los proveedores se ven obligados a cumplir con plazos estrictos, mientras que el gobierno no cumple con sus obligaciones de pago en el tiempo estipulado. Esto crea un ambiente de incertidumbre y estrés constante para las empresas que dependen de contratos gubernamentales.
### La Necesidad de un Diálogo Abierto
Para abordar estos problemas, es esencial que exista un diálogo abierto entre el gobierno y los representantes de la industria. La comunicación efectiva puede ayudar a identificar las áreas problemáticas y a desarrollar soluciones que beneficien a ambas partes. La industria farmacéutica y de dispositivos médicos ha expresado su disposición a colaborar con el gobierno para mejorar el proceso de entrega y garantizar que los insumos lleguen a tiempo a los hospitales.
En resumen, la situación actual del suministro de medicamentos y dispositivos médicos en México es compleja y multifacética. Los problemas de logística, planificación y coordinación son factores que deben ser abordados para asegurar que la población tenga acceso a los tratamientos que necesita. La colaboración entre el gobierno y la industria es fundamental para encontrar soluciones efectivas y garantizar un sistema de salud más eficiente y accesible para todos.