El huracán ‘Erick’ ha dejado una estela de destrucción en el estado de Oaxaca, afectando gravemente la infraestructura y la vida cotidiana de sus habitantes. Este fenómeno meteorológico, que se ha convertido en el primer huracán de la temporada 2025, ha sido catalogado como el más potente registrado en el mes de junio en territorio mexicano. A medida que ‘Erick’ avanzaba, se reportaron múltiples daños en viviendas, cierre de carreteras y la interrupción de servicios básicos, lo que ha llevado a las autoridades a activar protocolos de emergencia.
**Daños en Infraestructura y Servicios**
El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, ha informado sobre los efectos devastadores del huracán en una sesión extraordinaria de protección civil celebrada en San Pedro Mixtepec. Entre los daños más significativos se encuentra el cierre de la carretera costera 200, así como de las autopistas Barranca Larga – Ventanilla y Mitla – Tehuantepec. Estos cierres han dificultado el acceso a diversas comunidades, complicando la situación para los residentes que necesitan asistencia.
Además, se han reportado daños en viviendas en localidades como San Francisco Sola y Santiago Textitlán, en la Sierra Sur. En Pinotepa Nacional, donde ‘Erick’ tocó tierra, se han registrado afectaciones en áreas como Paso de la Garrocha y Corralero. La caída de al menos 17 postes de luz ha dejado a muchas comunidades sin servicio eléctrico, lo que agrava aún más la situación de emergencia.
Las autoridades también han decidido suspender 15 vuelos comerciales y varios privados en los aeropuertos de Puerto Escondido y Huatulco, con el objetivo de evitar cualquier riesgo para los pasajeros y el personal de las aerolíneas. Esta medida es parte de un esfuerzo más amplio para garantizar la seguridad de la población durante el paso del huracán.
**Medidas de Protección Civil y Respuesta a la Emergencia**
La activación de protocolos de emergencia es crucial en situaciones como la que enfrenta Oaxaca. La Coordinación Estatal de Protección Civil ha estado trabajando en estrecha colaboración con los municipios afectados para evaluar los daños y coordinar la ayuda necesaria. Hasta el momento, no se han reportado personas desaparecidas o fallecidas, lo que es un alivio en medio de la crisis.
Las autoridades han instado a la población a mantenerse informada a través de los canales oficiales y a seguir las recomendaciones de seguridad. Se han establecido refugios temporales para aquellos que han perdido sus hogares o que se encuentran en áreas de alto riesgo. Estos refugios están equipados con suministros básicos y atención médica para garantizar el bienestar de los afectados.
Además, se están llevando a cabo labores de limpieza y desalojo en las áreas más impactadas, con el fin de restablecer la normalidad lo más pronto posible. La colaboración entre diferentes niveles de gobierno y la participación activa de la comunidad son fundamentales para enfrentar esta crisis.
El huracán ‘Erick’ no solo ha dejado daños materiales, sino que también ha puesto de relieve la vulnerabilidad de muchas comunidades en Oaxaca ante fenómenos naturales. La temporada de huracanes es un recordatorio de la importancia de la preparación y la resiliencia ante desastres, así como de la necesidad de invertir en infraestructura que pueda soportar estos eventos climáticos extremos.
La situación en Oaxaca es un llamado a la acción para todos los involucrados en la gestión de desastres y la planificación urbana. La recuperación de las comunidades afectadas requerirá no solo esfuerzos inmediatos, sino también una visión a largo plazo que contemple la adaptación al cambio climático y la mitigación de riesgos.
En resumen, el paso del huracán ‘Erick’ por Oaxaca ha dejado una huella significativa en la región, con daños en infraestructura y servicios que demandan una respuesta rápida y efectiva por parte de las autoridades. La comunidad, unida en la adversidad, está demostrando su fortaleza y capacidad de recuperación ante este desafío natural.
