María Dolores González Saravia Calderón ha sido designada como la nueva presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM) para el periodo 2025-2029. Su elección fue unánime, con 60 votos a favor, en una sesión ordinaria del Congreso capitalino. Este nombramiento marca el inicio de una nueva etapa en la defensa de los derechos humanos en la capital mexicana, donde González Saravia se ha comprometido a fortalecer la autonomía de la Comisión y a mejorar la atención a quejas y la restitución de derechos.
La nueva presidenta ha expresado su deseo de ser un puente entre la Comisión y la ciudadanía, enfatizando la importancia de la transparencia y la participación ciudadana en el trabajo de la CDHCM. En su plan de trabajo, se propone consolidar la defensa social multisectorial y la construcción de paz, con un enfoque en la autonomía institucional y las capacidades técnicas de la Comisión. González Saravia ha destacado que su objetivo es abordar las causas de las violaciones a los derechos humanos, no solo los casos individuales, y ha llamado a la población a confiar en su gestión.
### Un Compromiso con los Derechos Humanos
María Dolores González Saravia es economista por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y cuenta con una amplia trayectoria en el ámbito de los derechos humanos y la transformación de conflictos. Su experiencia incluye la coordinación de procesos de diálogo y acción estratégica con movimientos sociales en el Centro Internacional de Investigación de la Economía Social y Solidaria (CIIESS) de la Universidad Iberoamericana. A lo largo de más de cuatro décadas, ha trabajado con comunidades y organizaciones civiles, convirtiéndose en una figura reconocida en la defensa de los derechos humanos en México.
Uno de los aspectos más destacados de su carrera ha sido su participación en procesos históricos, como los diálogos de San Andrés durante el alzamiento zapatista en Chiapas y su trabajo con víctimas de la represión en San Salvador Atenco. González Saravia ha dirigido organizaciones de referencia nacional, como Servicios y Asesoría para la Paz (SERAPAZ), dedicándose a la mediación y la defensa de los derechos humanos.
En su nuevo rol, González Saravia ha enfatizado la necesidad de garantizar la autonomía, independencia y confiabilidad de la CDHCM. Asegura que estos son elementos fundamentales para fortalecer la Comisión y su capacidad de respuesta ante las demandas de la ciudadanía. Su propuesta incluye la apertura de un nuevo sitio que permita mejorar el proceso de recepción y procesamiento de quejas, así como la investigación y elaboración de recomendaciones.
### Retos y Oportunidades en la CDHCM
El contexto actual en México presenta numerosos retos en materia de derechos humanos. La violencia, la inseguridad y la falta de acceso a la justicia son problemas que afectan a diversas comunidades. En este sentido, la nueva presidenta de la CDHCM ha manifestado su compromiso de trabajar en la identificación de las causas que generan estas violaciones y de proponer soluciones efectivas.
González Saravia ha mencionado que su enfoque se centrará en la construcción de condiciones para una vida digna, más igualitaria y justa para todos los habitantes de la Ciudad de México. Esto implica no solo atender las quejas individuales, sino también trabajar en la transformación de las estructuras que perpetúan la desigualdad y la violencia. La presidenta ha subrayado la importancia de establecer cambios políticos, institucionales y jurídicos necesarios para eliminar las condiciones que violan los derechos humanos.
La CDHCM, bajo su liderazgo, buscará avanzar en la elaboración de recomendaciones y en las rutas de cumplimiento, asegurando que las voces de las comunidades sean escuchadas y atendidas. González Saravia ha hecho un llamado a la población para que se involucre en este proceso, destacando que la participación ciudadana es clave para el éxito de su gestión.
En resumen, la llegada de María Dolores González Saravia a la presidencia de la CDHCM representa una oportunidad para revitalizar el trabajo en defensa de los derechos humanos en la Ciudad de México. Su experiencia y compromiso con las causas sociales son elementos que pueden contribuir a mejorar la situación de los derechos humanos en la capital del país. La nueva presidenta ha dejado claro que su gestión se basará en la transparencia, la participación y la responsabilidad, buscando construir un puente entre la Comisión y la ciudadanía para abordar las problemáticas que afectan a la población.
