La actriz y cantante Ninel Conde ha recibido una noticia desfavorable en su lucha legal contra la editorial Penguin Random House. La Octava Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México ha confirmado que Conde deberá asumir los gastos legales que la editorial ha incurrido durante el juicio por daño moral que ella misma promovió en 2021. Esta decisión se produce tras la apelación presentada por la artista, quien había demandado a la editorial debido a la publicación de un libro escrito por la periodista Anabel Hernández, en el que se mencionaba su nombre en un contexto que ella considera perjudicial.
La controversia comenzó cuando en el libro de Hernández, titulado «El bombón asesino», se incluyó un capítulo que hacía referencia a Ninel Conde, sugiriendo que era una mujer deseada por líderes del crimen organizado. Este contenido llevó a la actriz a presentar una demanda por daño moral, argumentando que su imagen y reputación se vieron afectadas. Sin embargo, el juzgado civil que conoció el caso en primera instancia falló a favor de la editorial, determinando que no había violación a los derechos de Conde.
### La decisión del tribunal y sus implicaciones
El abogado de Penguin Random House, Eduardo de la Parra, explicó que la sentencia de la Octava Sala confirma la decisión del juzgado de primera instancia, que ya había absuelto a la editorial de cualquier responsabilidad. «No hay violación a los derechos de Ninel Conde y, por tanto, no procede la indemnización que ella reclamaba», afirmó de la Parra. Esta resolución implica que Conde no solo pierde su demanda, sino que también se ve obligada a cubrir los costos legales del proceso, lo que podría ser un golpe significativo para sus finanzas.
La cantidad que Ninel Conde deberá pagar se determinará de acuerdo con los tabuladores establecidos por el Tribunal. Aunque la actriz ha perdido dos instancias en este proceso legal, aún tiene la opción de presentar un amparo ante un Tribunal de Colegiado de Circuito en Materia Civil. Este recurso es su última oportunidad para intentar revertir la decisión del tribunal, y debe ser presentado dentro de un plazo de 15 días a partir de la notificación de la sentencia.
De la Parra también mencionó que el amparo deberá resolverse antes de que finalice el año 2025, aunque no hay un plazo específico para su resolución, ya que el tribunal podría tardar debido a otros compromisos judiciales. La situación legal de Ninel Conde ha captado la atención de los medios y del público, no solo por su estatus como figura pública, sino también por las implicaciones que tiene sobre la libertad de expresión y el derecho a la imagen.
### Contexto de la demanda y reacciones
La demanda de Ninel Conde no solo se centra en la publicación del libro, sino que también refleja un contexto más amplio sobre cómo las figuras públicas son retratadas en los medios y en la literatura. La inclusión de su nombre en un capítulo que aborda temas tan delicados como el crimen organizado ha generado un debate sobre la responsabilidad de los autores y editores al tratar temas que involucran a personas reales, especialmente en contextos que pueden ser dañinos para su reputación.
La reacción de Ninel Conde ante la publicación del libro fue de descontento, y su decisión de emprender acciones legales fue vista como un intento de proteger su imagen. Sin embargo, la respuesta del tribunal ha dejado claro que, en este caso, la libertad de expresión y el derecho a la información prevalecen sobre las quejas de la actriz. Este desenlace ha suscitado opiniones divididas entre los seguidores de Conde y aquellos que defienden el derecho de los autores a expresar sus puntos de vista, incluso si estos son controvertidos.
La situación de Ninel Conde también ha sido objeto de discusión en redes sociales, donde sus seguidores han expresado su apoyo, mientras que otros han criticado su decisión de demandar a la editorial. Este caso pone de manifiesto la complejidad de las relaciones entre figuras públicas, medios de comunicación y el sistema judicial, y cómo estas interacciones pueden tener consecuencias significativas en la vida de las personas involucradas.
En resumen, la batalla legal de Ninel Conde contra Penguin Random House ha tomado un giro inesperado con la reciente decisión del tribunal, que no solo la obliga a pagar los gastos legales, sino que también plantea preguntas sobre la responsabilidad de los medios y la protección de la imagen pública. A medida que avanza este caso, será interesante observar cómo se desarrollan los acontecimientos y si Conde optará por seguir luchando en los tribunales.
