La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha presentado una iniciativa ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión que busca transferir las funciones del extinto Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Esta propuesta, que ha sido remitida a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados para su análisis, tiene como objetivo principal fortalecer la capacidad del Estado para evaluar el impacto de las políticas de desarrollo social en el país.
La iniciativa de reforma abarca modificaciones a varias leyes, incluyendo la Ley General de Desarrollo Social, la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, y la Ley de Contabilidad Gubernamental. Según el diputado presidente Sergio Gutiérrez Luna, estas reformas buscan armonizar y garantizar una transferencia efectiva de funciones del Coneval al Inegi. Esto implica que el Inegi asumirá nuevas responsabilidades en la medición de la pobreza y en la evaluación integral de la política de desarrollo social, así como en la emisión de recomendaciones y la coordinación con las autoridades de los tres niveles de gobierno.
Uno de los aspectos más relevantes de esta iniciativa es que se pretende mantener la continuidad de las series estadísticas históricas y la comparabilidad de las mediciones subsecuentes. Esto es crucial para asegurar que los datos sobre pobreza sean consistentes y confiables a lo largo del tiempo. La propuesta también delimita el ámbito de competencia del Inegi en la evaluación de políticas sociales, diferenciando sus funciones de las que corresponden al Sistema de Evaluación del Desempeño de la Secretaría de Hacienda.
El líder parlamentario de Morena, Ricardo Monreal, ha expresado su apoyo a la iniciativa, argumentando que permitirá al Estado cumplir de manera más eficiente sus funciones de evaluación. Según Monreal, la propuesta busca hacer más austera y racional la evaluación de las políticas sociales, lo que podría resultar en un uso más efectivo de los recursos públicos.
### Implicaciones de la Transferencia de Funciones
La transferencia de funciones del Coneval al Inegi plantea diversas implicaciones para la política social en México. En primer lugar, es importante considerar cómo esta reestructuración afectará la capacidad del Estado para medir y evaluar la pobreza. El Coneval, aunque no era un órgano autónomo, había desempeñado un papel fundamental en la evaluación de las políticas sociales desde su creación. Su eliminación podría generar incertidumbre sobre la continuidad y la calidad de los datos sobre pobreza en el país.
Expertos en políticas públicas han señalado que la desaparición del Coneval podría no resultar en un ahorro significativo para el presupuesto federal, como algunos argumentan. La investigadora Claudia Maldonado ha advertido que, si bien se busca simplificar la estructura del gobierno, la eliminación del Coneval podría tener consecuencias negativas en la calidad de la evaluación de las políticas sociales. Esto es especialmente relevante en un contexto donde la medición precisa de la pobreza es crucial para el diseño de políticas efectivas.
Además, la propuesta de reforma debe ser analizada en el contexto de la reciente reforma constitucional en materia de simplificación orgánica, que busca optimizar la estructura del gobierno. La transferencia de funciones al Inegi debe garantizar que se mantenga la independencia y la objetividad en la evaluación de las políticas sociales, lo que es esencial para la confianza pública en los datos que se generan.
### La Reacción de la Sociedad Civil
La iniciativa de Sheinbaum ha generado reacciones mixtas entre los actores políticos y la sociedad civil. Algunos grupos han expresado su preocupación por la falta de claridad en cómo se llevará a cabo la transición de funciones y qué medidas se implementarán para asegurar la calidad de la evaluación de las políticas sociales. La sociedad civil, que ha sido un actor clave en la defensa de los derechos sociales, está atenta a cómo se desarrollará este proceso y qué mecanismos se establecerán para garantizar la rendición de cuentas.
Por otro lado, hay quienes ven la iniciativa como una oportunidad para modernizar la forma en que se mide y evalúa la pobreza en México. La integración de funciones en el Inegi podría permitir una mayor eficiencia en la recolección y análisis de datos, lo que podría resultar en políticas más informadas y efectivas. Sin embargo, esto dependerá de la implementación adecuada de las reformas y de la capacidad del Inegi para asumir estas nuevas responsabilidades sin comprometer la calidad de la información.
En resumen, la iniciativa de Claudia Sheinbaum para transferir las funciones del Coneval al Inegi representa un cambio significativo en la forma en que se mide y evalúa la pobreza en México. A medida que avanza el proceso legislativo, será fundamental observar cómo se desarrollan las discusiones y qué medidas se implementan para asegurar que la evaluación de las políticas sociales siga siendo efectiva y confiable.